Este artístico edificio fue palacio del matrimonio formado por Don
Tomás Beruete y Udaeta y Doña Luisa Sáinz de Carlos y Garrido.
Obtuvo el premio de arquitectura de 1923 construido por el arquitecto
Don Enrique Pfitz y López, de la Real Academia de Bellas Artes de San
Fernando, y dispone de magníficos salones con tapices franceses del
siglo XIX, de la Real Fábrica, artesonados y bellísimas vidrieras
emplomadas, con escudos del linaje mencionado, cuadros con motivos
riojanos, teniendo escalera de acceso propia desde el portal, otra
escalera principal con su ascensor y escalera de servicio con
montacargas.